¿Qué es un suplido?
Un suplido en una factura se refiere al gasto que un profesional tiene a cuenta de un tercero. Es decir, se trata de un gasto que corresponde al cliente pero que el profesional, normalmente un proveedor, paga en su nombre y este posteriormente deberá asumir el importe. Dicho gasto ha de facturarse luego sin aplicar el IVA.
Estos gastos suplidos están regulados en la Ley de IVA (art. 78, Tres, 3º) y un ejemplo son el pago de tasas, portes o seguros.
Requisitos para considerar un gasto suplido
Hay tres requisitos que deben suceder para poder considerar un gasto como un gasto suplido:
- El gasto se ha de realizar a cuenta del cliente, llevando la factura el nombre del cliente final y no el de nuestra empresa.
- El pago del importe correspondiente se ha de justificar. Es importante tener la factura que justifique el pago del suplido, para que el cliente se lo pueda desgravar.
- Se debe realizar el pago por orden del cliente, el cual debe ser consciente del pago de estos gastos suplidos necesarios para realizar el trámite o servicio que haya solicitado.
Cómo hacer facturas con suplidos
Se deben tener en cuenta estos pasos para hacer facturas con gastos suplidos:
- Se debe facturar el gasto suplido sin aplicarle el IVA ni retenciones.
- Se debe sumar al total el gasto del suplido (IVA incluido).
- El gasto suplido no puede modificar la base imponible.
- Se debe acompañar la factura del gasto suplido con una copia de la factura que acredite que el gasto está a nombre del cliente por si hubiera una inspección fiscal.